Argollas Clicker: Qué son, cómo reconocerlas y tips para usarlas
Las argollas clicker se han convertido en una de las opciones favoritas para quienes buscan comodidad, estilo y seguridad al momento de elegir un piercing. Si todavía no conoces este tipo de joya o quieres saber cómo identificarla y sacarle el máximo provecho, aquí te dejamos una guía completa.

¿Qué son las argollas clicker?
Las clicker rings o argollas clicker son joyas especialmente diseñadas para perforaciones. Su nombre viene del sistema de cierre que incorporan: una bisagra con un pequeño clip que hace “clic” al cerrarse. Esto permite abrir y cerrar la argolla con facilidad, sin necesidad de herramientas.

A diferencia de las argollas tradicionales (que a veces requieren ser enroscadas o forzadas para colocarlas), el clicker garantiza un ajuste seguro y sencillo.
¿Cómo se componen?
Una argolla clicker se compone de tres partes principales:
- La argolla o aro principal: es el círculo de titanio, acero quirúrgico, oro u otro material hipoalergénico.
- La bisagra: ubicada en un punto del aro, permite abrirlo como si fuera una pequeña puerta.
- El clip de cierre: encaja con un sonido “clic” que asegura la pieza en su lugar.

Gracias a este diseño, las clicker son muy seguras y reducen el riesgo de que la joya se abra accidentalmente.
¿Cómo reconocer una argolla clicker?
A veces los clientes confunden las clicker con argollas segmentadas o continuas, pero hay formas simples de reconocerlas:

Tips para usar tu argolla clicker
- Elige el material adecuado: si tienes piel sensible, prefiere titanio grado implante o acero quirúrgico.
- Verifica el diámetro: mide tu perforación o pide ayuda a tu perforador para escoger el tamaño ideal (6 mm, 8 mm, 10 mm, etc.).
- Asegúrate del “clic”: siempre escucha o siente el cierre antes de darla por colocada.
- Límpiala con regularidad: aunque sea hipoalergénica, mantenla limpia con solución salina o jabón neutro.
- Úsala en distintas perforaciones: son versátiles, ideales para septum, daith, hélix, tragus e incluso lóbulos.

¿Por qué elegir una argolla clicker?
- Fáciles de colocar y retirar sin ayuda profesional.
- Seguras gracias a su cierre.
- Cómodas porque no tienen bordes que lastimen.
- Estilizadas: disponibles en múltiples diseños que se adaptan a tu estilo.

🌟 Sabías que…
🔹 El “clic” es intencional: el sonido no solo es práctico, fue diseñado para darte seguridad al saber que la joya quedó perfectamente cerrada.
🔹 Nacieron para los profesionales: los clicker fueron creados para facilitar el trabajo de los perforadores, ya que los aros tradicionales eran incómodos de abrir y cerrar.
🔹 Su boom empezó con el septum: aunque hoy se usan en daith, hélix y tragus, su primera gran popularidad fue en piercings de septum por su comodidad y estética.
🔹 Decoración sin límites: a diferencia de los aros clásicos, los clicker permiten incrustaciones de zirconias, formas y filigranas sin afectar su fácil apertura.
🔹 Ideales para piel sensible: fabricados en titanio grado implante, muchos clicker se volvieron el favorito de quienes sufren alergias al níquel.